21/11/14

LA PROVOCACIÓN DE OLGA


Mis eternas y excitantes búsquedas por internet, a veces me llevan a encontrar imágenes que deseo explorar, investigar, y me llegan a seducir tanto que no ceso hasta hacer una recopilación y así disfrutar de ellas con vosotros.

Hoy, ha llegado a mí una historia que me ha parecido tremendamente interesante, "La historia de Olga".

Para poneros en antecedentes he de confesaros mi admiración, y seguimiento constante a la fotógrafa Ellen Von Unwerth, y hay una colección específica de sus fotos, que me llama mucho la atención. 

Pues bien, rebuscando he encontrado una historia interesante para mí y espero que para vosotros también y me gustaría que fuera la base del post de esta semana.


Olga Rodionova, es una modelo rusa nacida en el 1974, inspiración de fotógrafos como Helmut Newton, David LaChapelle, Terry Richardson, entre otros.

Casada con un multimillonario ruso que la adora, decide pedirle a la fotógrafa francesa Bettina Rheims, que le haga a su mujer fotos y retratos bajo una serie de incentivos económicos.

Bettina, queda fascinada por su aura y decide iniciar una estética para su reportaje fotográfico, cargado de sensualidad, erotismo pero sin caer nunca en un cliché pornográfico.

Sergey, marido de Olga acudió a una de las primeras sesiones fotográficas y quedó tan seducido por la estética que propuso hacer un libro con fotografías de su mujer.




Ya en la segunda sesión fotográfica, toda en blanco y negro, la provocadora Olga, practica juegos perversos con otros hombres, usando como lei motiv, el sadomasoquismo. 

Aunque os parezca que ahora está muy de moda por el libro reciente de "Las cincuentas sombras de Grey", este libro salió a la luz en el año 2008, y fue toda una revolución en la sociedad moscovita.

Aquí nació el "Libro de Olga", pero esta provocadora, y seductora mujer que además de modelo es actriz, se la conoce en país,  por ser una defensora de los derechos y libertades sociales en Rusia, y ha obtenido con éxito en los tribunales, su lucha contra la violación y difamación de la intimidad.

María Antonieta, fue otra de las fuentes de inspiración de esta sesiones fotográficas, que se recopilan en este libro que difícilmente podrás encontrar en cualquier librería, puesto que no baja su precio de los 2000€.

Pero la historia de Olga no termina aquí...

La fotógrafa Ellen Von Unwerth, decide sacar un segundo libro con Olga como inspiración, y como casi una saga de fotos eróticas y llenas de provocación donde el sadomasoquismo, las escenas lesbicas y orgiasticas son aún más protagonistas que en el libro anterior.

En esta ocasión, y para causar más morbo y expectación, la autora solo lanza al mercado 1.000 copias numeradas y firmadas.

Ellen, inventa una historia sobre Olga y la retrata como una mujer viuda de su anciano marido, que decide iniciar una búsqueda del amor, pero se adentra en un mundo lujurioso, sensual, y cargado de erotismo.







Es curiosa esta historia, que empieza con los deseos de un marido adinerado ruso, que probablemente, y esto es de mi cosecha, disfruta y le produce gran placer ver estas fotos tan eróticas con su mujer, Olga, donde comparte espacio con hombres y mujeres en actitudes muy sexuales. 

Probablemente más de uno, que no tiene la cartera tan repleta de billetes, pagaría por hacer lo mismo con su pareja.

Lo cierto es que a mi esta estética me parece un arte,  puede haber seguidores y detractores de este tipo de fotografía con un alto contenido sexual, pero allá cada cual con sus tabúes.







Pues hasta aquí ha llegado esta mezcla,  el estilo provocador, sensual y sexy de la fotógrafa, con la estética rompedora, erótica y sin pudor de la modelo. Juntas han logrado una serie de imágenes que al menos no dejan al espectador, inerte, sino todo lo contrario.

Esta historia de Olga la tienen calificada como "La historia más sexy del mundo", yo no se si será la más sexy del mundo pero al menos a mi me ha seducido y ha provocado en mí cierto interés y admiración.

Os dejo con una frase que me encaja a la perfección hoy;

"El instinto erótico pertenece a la naturaleza original del hombre. Está relacionado con la más alta forma de espíritu".

Os espero pronto.

Ángeles Castro


3/11/14

EL ESPEJO DEL ALMA


Dicen que la cara es el espejo del alma; aunque qué pasaría, si cubriéramos nuestro rostro con máscaras. 

Éstas podrían ocultar nuestro verdadero YO, pero y si esas máscaras, no fueran tangibles, y si además,viviéramos en un mundo en el que todos nos ponemos una máscara para salir a la calle, y realmente nadie conoce a nadie.

¿Quién conoce nuestro verdadero alma?, ese alma que dicen que se refleja en nuestro rostro, en nuestras muecas, en nuestra mirada, en nuestras facciones.










Las máscaras aparecieron cuando el hombre tuvo autoconsciencia, y se usaban para fines religiosos, o paganos. En algunos casos incluso las propias máscaras se realizaban con muecas o expresiones que causaran tristeza, temor, o alegría, para así expresar lo que el propio rostro no expresaba.

Lo que sí sabemos, es que la máscara hoy en día, que sólo se usa para ocasiones carnavaleras, o en algunas etnias y tribus,  como simbología religiosa. Pero que no llevemos máscaras físicas no significa que cada uno de nosotros no tengamos una máscara propia, con la que salimos cada día a la calle.










Expresamos alegría en ocasiones que estamos tristes, sorpresa cuando no estamos hastiados, entusiasmo cuando estamos aburridos, todos en alguna ocasión hemos tirado de esa máscara para interpretar un papel que no es el real.

Cuando conocemos a alguien por primera vez, todos sacamos esa "máscara" del bolsillo, la mejor, la más dulce y encantadora, pero poco a poco las máscaras se van cayendo y descubres la verdadera imagen, en muchas ocasiones mejor que la que aparentábamos ser y en otras mucho peor.









Las revistas de moda no se quedan atrás, maquillajes en forma de máscara, tules, encajes, cueros, metales, todo es válido para dar ese aspecto misterioso y casi hierático, que nos muestra expresiones de dulzura, agresividad, sensualidad, o ternura, dependiendo del estilo, color o forma que esta tenga.

En la vida real nuestro rostro puede modificarse, creando nuestra propia máscara, y así no reflejar o no dejar entrar más allá de lo visible.

Para los amantes del cine como yo, sabemos como un personaje puede cambiar de rostro, del más aterrador al más dulce con un simple gesto de su mirada, su sonrisa o sus muecas. Esta es la magia del cine, y de como una misma persona puede cambiar su máscara y ser otro personaje sin añadir nada a su rostro.











Si muchos de nosotros nos enamoramos de un rostro, de una mirada, de una expresión, os imagináis como sería si de repente todos cubriéramos nuestro rostro y solo saliera nuestro verdadero yo, con nuestras virtudes y defectos con el comportamiento y la personalidad, y no por un rostro bonito que nos deje entusiasmados.

Pero el ser humano necesita mirar en los ojos del otro y necesita sentir lo que la otra persona siente, y es por esto que necesitamos ver los ojos, la boca, la sonrisa de las personas, aunque con esto no nos garanticemos que sea su verdadera cara o una fingida.



Por eso a menudo creemos conocer a las personas, por lo que refleja su rostro, identificamos rasgos como partes de la conducta, pero realmente no nos conocemos ni a nosotros mismos, como para garantizar por una expresión del rostro del otro, como es o como se comportaría.

Yo para ser honestos juzgo más las conductas que los rostros, que son mucho más expontáneas, y aún así como decía Platón: "Lo que no se, tampoco creo saberlo"

Os veo pronto!!

Ángeles Castro